Historia de la relojería SIGLO XIII




Uno de los primeros libros que habla de un reloj, lo podemos ver en la publicación con el nombre de Libros del Saber de astronomía (1276), del Rey Alfonso X el Sabio (1221-1284) en la corte toledana.
5 libros dedicados a la construcción de relojes:

Sol "Relogio de la Piedra de la Sombra". -Rabiçag o Isaac ibn Sid- 
Sol "Relogio del Palacio de las Oras". -Rabiçag o Isaac ibn Sid- 
Combustión "Relogio de la Candela". -Samuel el Leví- 
Clepsidra "Relogio dell Agua".-Rabiçag o Isaac ibn Sid- 
Clepsidra de mercurio "Relogio del Argent Vivo". -Rabiçag o Isaac ibn Sid-
 "Relogio de la Piedra de la Sombra"
Es un reloj de sol horizontal, con un gnomon vertical, alrededor esculpidas las líneas de las horas.
Dos grandes secciones, la primera, 14 capítulos, constucci´0n y la segunda, 4 capítulos, manual de utilización.

 "Relogio del Palacio de las Oras"
Edificio con 12 aberturas o ventanas, situadas de tal modo, que cada rayo de sol atraviese las ventanas indicando  cada una de ellas las horas.
Dos variantes, primera, las ventanas están situadas en la pared circular vertical del edificio y la segunda, las ventanas están en la cúpula del palacio.

"Relogio de la Candela"
Muestra las horas y la posición de los signos zodiacales, por medio de una vela.
La vela esa sujeta sobre una plataforma que puede ascender impulsada por cuatro pesos que cuelgan de dos poleas, la vela solamente asoma al exterior el pabilo, mientras la vela se consume, la plataforma impulsada por los pesos asciende, indicando las horas y los signos zodiacales.

"Relogio dell Agua"
Clepsidra muy avanzada, un gran deposito de agua cerrado herméticamente que alimenta un pequeño depósito que tiene el agujero de goteo en el fondo y cuyo nivel se ha de mantener constante para que el goteo sea regular y utilizable para la medida del tiempo.

"Relogio del Argent Vivo"
Clepsidra de circuito cerrado, el agua es sustituido por mercurio "plata viva".
Una rueda o cámara circular dividida en doce compartimentos comunicados entresi por doce agujeros muy pequeños, seis delos compartimientos están llenos de mercurio y al desequilibrar la rueda, el mercurio se desplaza muy lentamente de un compartimiento al siguiente intentando ocupar siempre los seis situados en la parte inferior.
El reloj se completa con un mecanismo sonoro con el cual se acciona unas campanadas a cada hora

PRIMER ÓRGANO REGULADOR EN LA RELOJERÍA:

EL FOLIOT, LAS PALETAS Y LA RUEDA CATALINA:


El FOLIOT (el volante hoy en día) es un tipo de regulador (quizás el primer regulador) de reloj inventado a finales del SIGLO XIII o principios del SIGLO XIV, algunos autores indican que pudo ser hacia 1285.


El nombre proviene de FOLIOT, del francés: "Faire le fou": estar loco, o dar vueltas como un loco, se denominaba cariñosamente "loquillo", sensación de estar yendo de un lado para otro.


Las PALETAS (el ancora de hoy en día)

La RUEDA CATALINA (rueda de escape de hoy en día), el nombre procede, a su vez de la forma que tenía, la rueda con que sufrió tormento santa Catalina de Alejandría (año 307 d. J.C.) patrona de los filósofos, cuya rueda se rompió en tal ocasión."
Al principio no sería más que una barra horizontal, embutida en un eje vertical sacudido a intervalos más o menos regulares por la rueda de escape, pero pronto se introducirían muescas para adelantar o retrasar el momento de inercia colgando en ellas pequeñas pesas (régulas), regulándose de este modo la marcha del reloj (según las pesas se alejasen o acercasen al eje de rotación del foliot, la marcha sería más rápida o más lenta)..

Está sistema de regulación se caracteriza por tener el escape (Escape Verge) perpendicular al eje de giro principal del reloj, sobre éste hay una rueda dentada que es movida por dos pesas colgando de una polea (los pesos suelen ser piedras elegidas apropiadamente por su peso), esta rueda empuja dos paletas fijadas a una varilla que hace mover a una barra horizontal oscilante, en forma de cruz, en dirección opuesta.

Al no disponer de regulador la precisión de este reloj no era muy buena, llegando a perder más o menos media hora al día en el mejor de los casos.

1240, Guilamus Alvernus haciendo uso de relojes de agua.

1284, reloj de la catedral de Exater.

1284, Obispo Gulielmus Durandus. Exposición razonada Divinorum Officiorum describe la construcción y el contenido ideal de una iglesia, incluyendo un reloj en algún lugar de su estructura.